En una sociedad tan competitiva como en la que vivimos, se hace indispensable la utilización de diversas técnicas de marketing que favorezcan la rentabilidad de nuestro negocio. Este es el caso del merchandising.
El merchandising o micro-mercadotecnia es la parte de la mercadotecnia cuyo objetivo es aumentar la rentabilidad en el punto de venta a través de la estimulación de la compra. Para ello, se emplean diversos métodos, entre los cuales se trabajan diferentes aspectos relacionados con el producto, como su colocación y presentación, buscando influir psicológicamente en el consumidor final. Para lograrlo, se fundamenta en 3 pilares básicos: llamar la atención del cliente, dirigirlo hacia el producto y facilitar su acción de compra.
A lo largo de su historia, el merchandising se ha ido desarrollando para lograr satisfacer todas las necesidades del consumidor y facilitar así el proceso de compra, adaptándose a los nuevos tiempos y a las circunstancias actuales.
A pesar de que existen muchas variantes que se complementan entre sí, el merchandising de seducción está teniendo un mayor auge por sus características basadas en la última tendencia en marketing, el neuromarketing, que busca inferir psicológicamente en el comportamiento del consumidor para incitarlo a la compra.